sábado, 7 de febrero de 2015

LA INFORMACIÓN EN PRENSA SOBRE EDIFICIOS BIOCLIMÁTICOS


De nuevo la información en prensa sobre sostenibilidad y bioclimatismo hace más daño que otra cosa. Informaciones erróneas o incompletas y, sobre todo, la elección de los ejemplos, más por su rareza o singularidad que por su auténtico valor, confunden al que lo lee.


Es el caso de esta reciente noticia en la que se muestra una construcción, que en el artículo se define como “integrada en el paisaje”, pero cualquiera que vea la foto se quedará atónito de esa calificación. No voy a comentar la imagen que proyecta, porque eso siempre es subjetivo, pero estoy seguro de que la inmensa mayoría de la gente interesada en hacerse un edificio bioclimático, al verla, huiría inmediatamente de ese pensamiento y no se lo volvería a plantear.

En la noticia, como veréis, se confunde el uso del adobe y los bloque de tierra comprimida con el empleo de sacos llenos de tierra, que suponen una solución diferente, probablemente con alguna ventaja, pero también con aspectos indudablemente peores.

Tampoco se puede decir, como se dice, que los sacos de tierra ahorran energía, porque es absolutamente falso, ya que la tierra aporta inercia pero no es el material adecuado para aislar. Igual que decir que es económica, porque o es un error la cifra indicada o para su tamaño es francamente cara.

Creo que son válidas todas las ideas, pero hay que tener cuidado cuando se les quiere dar valores más allá de los que tienen, que pueden ser experimentales, porque el mercado de la arquitectura bioclimática, de la sostenibilidad y de la ecología en general, es delicado y no se deben provocar confusiones.